Las metáforas ha sido una herramienta usada en diversas culturas, ya que se dirigen a todo publico y cada uno desde su experiencia interpreta y toma lo que corresponde, en la tradición judia esta no ha sido la excepción y el siguiente relato nos ilustra claramente cual debe ser nuestra actitud frente del amor.
Dice un cuento israelita que:
“Un joven fue a visitar a un sabio consejero y le contó sobre las dudas que tenía acerca de sus sentimientos por su FAMILIA. El sabio lo escuchó, lo miró a los ojos y le dijo sólo una cosa:
– Amala.
¡Y luego se calló!
El muchacho dijo:
– Pero, todavía tengo las dudas …
– ¡Amala, le dijo de nuevo el sabio!
Y, ante el desconsuelo del joven, después de un breve silencio, le dijo lo siguiente:
– ¡Mi hijo, amar es una decisión, no un sentimiento!
Amar es dedicación y entrega; ¡Amar es un verbo y el fruto de esa acción es el amor!
¡El amor es un ejercicio de jardinería!
Arranque lo que hace mal, prepare el terreno, siembra, sea paciente, riegue y cuide.
Esté preparado porque habrá plagas, sequías o excesos de lluvias, pero no por eso abandone su jardín.
Ame, es decir, acepte, valorice, respete, dé afecto, ternura, admire y comprenda.
¡Simplemente Ame !!!
¿Sabes por qué?
Porque la inteligencia, sin amor, te hace perverso;
La justicia, sin amor, te hace implacable;
La diplomacia, sin amor, te hace hipócrita;
El éxito, sin amor, te hace arrogante;
La riqueza, sin amor, te hace avaricioso;
La docilidad, sin amor, te hace servil;
La pobreza, sin amor, te hace orgulloso; La belleza, sin amor, te hace ridículo;
La autoridad, sin amor, te hace tirano;
El trabajo, sin amor, te hace esclavo;
La simplicidad, sin amor, te desprecia;
La política, sin amor, te deja egoísta;
Y LA VIDA SIN AMOR, NO TIENE SENTIDO.
Es claro entonces que los sentimientos que abrigamos no deben estar vinculados solamente a emociones sino a un estado conciente que lleva a resoluciones respecto de la relación.
Este enfoque no es fácil de digerir, ya que se entiende que el amor esta vinculado al enamoramiento, por el que cada individuo ha pasado, más este sentimiento o emoción tiende a desvancerse y es en ese punto que se debe tomar la decisión de amar, en los terminos descritos en el cuento.