En el lenguaje chino, para definir la palabra crisis se hace al poner dos ideogramas juntos y como se puede observar en la imagen, uno es para la dificultad y otro para la oportunidad.
Es así que al utilizar la figura de la “Y”, se propone una ubicación espacial donde usted o yo yendo por el camino recto nos topamos con el vertice o punto donde se bifurca en dos lineas, una representrando la dificultad y otra la oportunidad , más estos dos conceptos son neutros, es decir; el valor de cada palabra dependerá de la interpretación personal que se le da a la situación o circunstancia.
¿como podemos identificar que valor se le esta dando a la circunstancia?, solo y simplemente por la conversación que estamos desarroillando dentro de nosotros y una de las caracteristicas de esas conversaciones son las preguntas.
1a pregunta:
¿Porqué me pasa esto a mi?, hago esta pregunta por causa de que lo que observo, es una dificultad, esta pregunta me victimiza, y los terminos de la conversación se dirigen hacia la construcción de una sinsalida. No desarrollo emociones, como la esperanza, la tranquilidad, la paciencia sino los antonimos perfectos de esas emociones. Mi visión es turbia, mi conversación no me da soluciones,
2a pregunta:
¿Para qué me pasa esto a mi?, esta pregunta me proyecta, dinamiza mi interior, converso conmigo mismo en terminos de la busqueda de recursos para solucionar, aprendo, analizo, concluyo que lo que me pasa tiene un propósito para mi.
Siguiendo en la linea del lenguaje y como este nos define, pongo a su consideración la palabra EXPRESAR.
Esta palabra viene del latin EXPRESSUS, participio de EXPREMIERE, de donde EX (hacia fuera), PRESSUS (presionar). Interpretando: – que es lo que usualmente hacemos al conversar con nosotros mismos- Es un esfuerzo conciente o inconciente, que se verifica en nuestro exterior o parecer (semblante).
Se propone, entonces, las siguientes declaraciones como herramientas del lenguaje hacia una actitud positiva ante la crísis:
1. Piensa positivo, tiene mucho que ver con la gratitud.
2. Habla positivo, tanto interna como exteriormente. haz que tu mente oiga lo que piensas delante de un espejo.
3. Exprésate positivo. Cuando te presiones a salir de ti mismo, que lo que el entorno vea sea confianza, tranquilidad, análisis, control a pesar de las circunstancias. Estas salidas se pueden modular mediante buenos hábitos de sueño, lectura, alimentación, ejercicio, higiene, cuidado de tu ropero, todo lo anterior juega un papel preponderante en como sales y como te ven – que es la retroalimentación que tu entorno te da.
Si quieres que te vean bien, comienza a expresarte bien desde adentro. la respondabilidad es tuya.
El Coaching como servicio, pretende ser un modulador de esas conversaciones a fin de que cualquiera que se beneficie encuentre cual debe ser la calidad de sus conversaciones, y que pueden llevar a solucionar desafios convirtiendolos en oportunidades.